20 noviembre 2006

Pesadilla recurrente

La Ley de la Carrera Militar atribuye poderes policiales a unidades del Ejército
Los miembros de la Unidad de Emergencias y la Policía Militar serán "agentes de la autoridad"

(El País.com, en el día de nuestro señor 20 de noviembre, aniversario de..., no, no puede ser, o sí, joder, ¿casualidad?, ¿broma?, jooooodeeeer).


¡Ay, ay, ay! No eran bastantes dos policías (municipal y nacional) y una guardia civil, no, eran pocos. Pronto, si estoy en el sitio y lugar equivocados, me cruzaré con algún chusquero que se volverá a dar el gustazo de darme órdenes. Y es que va a ser verdad que los sueños (algunos, los malos) se cumplen. Y no hará falta que vuelva por el Alto Aragón, no, me los encontraré en cualquier lugar, quién sabe si por las calles de mi barrio.
Gracias, PSOE, gracias, Zapatero, por liarme más de lo que ya estoy. Al cabo de unos años, resulta que el PP deroga la mili obligatoria, y el PSOE saca las tanquetas a la calle.
Joder. Qué lío. Qué triste...

Truco (aunque para chistera, la del Gobierno):

Antes de imprimir un documento, un escrito, una carta, cuidadín con las terminaciones al final de línea. Es poco estético dejar más de tres guiones de partición en tres líneas consecutivas o cinco signos de ortografía seguidos, como puntos, comas y guiones. Además, algunas palabras tiene particiones digamos que políticamente incorrectas: sa-cerdote, dis-puta, vín-culo. Y no digamos si sa- queda al final de una página, y la siguiente empieza por cerdotes de la parroquia; o si puta de los senadores empieza página porque la anterior termina con dis-. O bien puto del año, si la anterior temina en cóm-.