30 noviembre 2006

El Instituto de la Mujer

Supongo que sí, que nuestros dineros se emplearán, a través de esta institución, en conseguir la igualdad entre los géneros. Que impulsarán medidas para evitar el sexismo en los lugares de trabajo, en los colegios, en el deporte, en la política... Vamos, de hecho me consta que lo hacen.

Pero me temo que, como todo organismo oficial que funciona con un presupuesto, llega final de año y tienen que justificar sus inversiones y, además, en aras de la transparencia, las dan a conocer. Y se descuelgan, año sí, año también, con el asunto recurrente del sexismo en el lenguaje. La última la he escuchado hoy en la radio, y se hace eco (una vez más) del asunto de las profesiones. Bedela por bedel, miembra, albañila, tenienta...

Son ganas de interferir en lo natural, que es, simplemente, dejar que el pueblo haga evolucionar el lenguaje con su uso. Si no hubiera habido evolución, como poco estaríamos hablando todavía en latín. Y, sin embargo, este Instituto "exige" cambios en la Real Academia, en sus diccionarios. ¿Por qué no dejan que seamos nosotros, los usuarios, los que poco a poco hagamos los cambios? A nadie le choca escuchar hoy en día la palabra "presidenta", pero, oiga, qué quiere que le diga, "albañila"...

Claro que, como todo en esta vida, el asunto puede ir a peor: si la Real Academia acepta estas exigencias, igual le da por unificar criterios (por aquello de limpiar, fijar y dar esplendor) y oficializa términos como electricisto, taxisto, taxidermisto, peristo y artisto (este último "mola": "Mamá, quiero ser artisto").

En el polígono industrial que atravieso por la mañanas las prostitutas ya se calientan con hogueras hechas en bidones. Es una idea.
De nada.

Truco del día (a huevo):

Nada más farragoso que ver en un escrito el/la niño/niña vasco/a. Y no digamos el estilo del lehendakari, los vascos y las vascas. Si no queremos ser machistas (¿o debería decir machistos?), podemos hacer alguna perífrasis o bien utilizar algún genérico: La infancia de Euskadi, la ciudadanía vasca...

7 comentarios:

Blogger gemmacan ha dicho...

Aunque ya habíamos tocado el tema -allá en el Círculo Polar Ártico- siempre está bien recordarlo. Y tienes más razón que un santo. O al menos yo te la doy, y soy mujer.

Amigos y amigas, buenos días!

PD: Consejo estético. ¿Por qué no justificas el texto? así, todo igualadito por la derecha y por la izquierda. :)

8:19 a. m.  
Blogger Onallera ha dicho...

Mia +
Tú sí que me comprendes... Buenos días

8:23 a. m.  
Blogger Onallera ha dicho...

Sus deseos...

8:30 a. m.  
Blogger gemmacan ha dicho...

¿Ves? Si es que no tiene nada que ver ¿dónde vas a parar? ¡mucho mejor hombre!

No, no te creas, no te he comprendido nunca, pero igual te acepto así como eres.

¿Mis deseos son órdenes? ¡Anda, anda, cuchipanda! (Tienes un morro)

12:36 p. m.  
Blogger eli bennet ha dicho...

Acá van más....policío, electricisto, pilota de aviones o lo que sea....
Si no queremos ser machistas y en pos de ello feminizamos algunas profesiones, justamente para no ser machistas y que las mujeres tengan un trato igual al hombre, deberíamos hacer lo mismo en masculinizar otras, para que todos seamos tratados iguales.
Bueh...no se si me explico, pero es que el feminismo no sirve para nada porque es obvio que todos somos iguales sólo por el hecho de ser humanos...y olé...
Un abrazo, Zinadine...

12:58 p. m.  
Blogger Onallera ha dicho...

Mia Plus:

¿Cuchipanda? Jajajaj, eso no lo había oído

Eli (¿familia del gran Tony Bennet?):

Te explicas muy bien (Lo de pilota también me gusta: pilota y artisto, términos que voy a adoptar).

8:49 a. m.  
Blogger gemmacan ha dicho...

¿Sabes quién decía lo de "Anda cuchipanda"? ¡Espinete! (cosas de mi infancia, aquellas que no se olvidan)

Besos!

1:50 p. m.  

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